Los barriletes de Santiago de Sacatepequez
BY ENRIQUE CORDOBA
ESPECIAL/EL NUEVO HERALD
La colina donde se encuentra el cementerio de Santiago de Sacatepequez, en Guatemala, presentaba este comienzo de mes, un ambiente de muchedumbre, fiesta y colorido.
No había lagrimas, ni tristezas, sino marimba, fiambre, cerveza y atuendos de hermoso colorido.
Santiago y Sumpango son los dos cementerios más populares y famosos, donde concurren los guatemaltecos todos los años a celebrar la Festividad del Día de los Muertos y de los Santos.
En nuestros días siguen los rituales de acudir al camposanto, en familia para pasar una jornada junto a los difuntos en su día. El pasado domingo, 1ro. de noviembre, también llevaron el acostumbrado platillo típico de fiambre, que contiene embutidos, mortadela, chorizo negro, jamones, pescado y quesos.
La tradición es comer el fiambre con la familia y compartirlo con otras gentes que van al cementerio, explica Aldo Pena, guía turístico del Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT).
Para celebrar el Día de Todos los Santos, el 2 de noviembre, el cementerio de Santiago de Sacatepequez, recibió una interminable romería de peregrinos, en la que predominaron los niños que llegaban emocionados a volar sus vistosos y gigantescos barriletes o cometas.
Lo mismo ocurrió en el cementerio de Sumpango, a 40 kilómetros de Ciudad de Guatemala, la capital del país, donde asistió más de un millon de personas, muchas de ellas turistas nacionales y otros venidos del exterior.
Los barriletes gigantes de Santiago Sacatepequez cautivaron las miradas de los visitantes.
Un barrilete gigante de 18 metros, otro de tres metros que representaba elementos como calaveras y grifos mayas y otro de 2.85 metros con la imagen del patrono del pueblo, fueron los más aplaudidos.
Edwin Feliciano Saschicote, un joven de 15 años de edad, tardó tres semanas con cuatro amigos para armarlo, con papel china pegado a unas cañas de guadua.
El cementerio se transforma en un vistoso esenario tomado por grupos de niños y adultos que participan en una competencia que pone a prueba la destreza con los barriletes.
Los turistas acuden al cementerio para disfrutar del espectáculo al aire libre y a degustar los platos típicos de Guatemala.
Se consigue no sólo buen café, deliciosa horchata y exquisitos frijoles parados con queso blanco, sino el especial asado chapín de lomito.
El mundo del turismo ha descubierto a Guatemala, que con su eslogan «pais de la eterna primavera», recibio 1.7 millones de turistas el ano 2008.
Con sus 108,889 kilómetros cuadrados de superficie, Guatemala llegó a ser «corazón del mundo maya» y cuna de una de las mayores civilizaciones del continente.
Su atractivo está respaldado por esa riqueza cultural viva a lo largo de su geografía y en ciudades como Antigua Guatemala, Chichicastenango y Panajachel.
Antigua Guatemala es una de las ciudades más fotogénicas de América y más visitadas por los turistas. Aun conserva muchas edificaciones como templos, conventos y monasterios construidos durante el período en que España la designó capital religiosa de Centroamérica y el área de Chiapas. Sus calles empedradas, las bugambilias y los edificios civiles y domésticos son hoy encantadores hoteles y casonas con patios centrales adornados de jardines y habitaciones con detalles únicos.
Guatemala, con 13 millones de habitantes, es un país para visitar si se buscan escenarios naturales, ríos y lagos como el Atitlán, para deportes de agua dulce, y costas de mar en ambos océanos. •